Los proyectos forestales y los de nutrición, tienen sus propios sistemas para el requerimiento y evaluación. La forestería, a menudo, observarse los rendimientos fisicos de los bosques (por ejemplo, el número de plantones instalados o viveros establecidos). La nutrición, por otro lado, frecuentemente utiliza medidas antropométricas. En un proyecto forestal que incorpora aspectos nutricionales, pero que no cuenta con los servicios de un nutricionista, puede necesitarse el diseño de nuevas medidas. Las medidas del bienestar nutricional y los indicadores para el seguimiento y evaluación, deberían focalizarse sólo en aquellos aspectos que son relevantes para el proyecto. Por ejemplo en ausencia de nutricionistas, exámenes clínicos, pruebas de laboratorio y mediciones antropométricas no son las medidas más apropiadas del bienestar nutricional para los proyectos forestales. Estas medidas requieren personal capacitado y/o equipos. Además, es difícil determinar los efectos específicos de las actividades forestales sobre el bienestar nutricional a través de estas técnicas de medición. Los cambios en el peso de los niños, por ejemplo, podrían ser debido a factores que involucran cambios en la distribución familiar de alimentos, en lo cual la foresteria no puede influenciar. El propósito es medir el impacto de las actividades del proyecto sobre el bienestar nutricional de la población.
La medición del impacto de un proyecto forestal con indicadores nutricionales requiere ideas creativas. Un simple indicador no es apropiado para todos los proyectos. La selección de indicadores dependerá de los recursos y habilidades de la población implicada. Los indicadores escogidos deberían reflejar los objetivos del proyecto, tal como son determinados por la comunidad. Los nutricionistas, si están involucrados en el proyecto, pueden ayudar a seleccionar los indicadores. Si el objetivo es incrementar el empleo, el número de puestos de trabajo creados para las personas vulnerables desde el punto de vista nutricional podría ser un indicador para el seguimiento y evaluación del proyecto. los proyectos agroforestales que procuran introducir tecnologías para aumentar la productividad agrícola, extender el trabajo a todas las estaciones, o incrementar la disponibilidad de forraje, podrían realizar un seguimiento específico y evaluar cómo los resultados del proyecto contribuyen al suministro de alimentos a lo largo del año, y usar indicadores pertinentes para eso. Los posibles indicadores incluyen la disponibilidad estacional de slimentos (especialmente para los grupos beneficiarios seleccionados), la diversidad alimentaria, la capacidad de almacenamiento (en términos de volumen y duración). Los proyectos que apuntan a mejorar la nutrición expandiendo el tiempo disponible de las mujeres (a través de tecnologías que economizan trabajo o de un incremento de provisión de agua y leña), debieran medir su impacto, registrando el tiempo para el cuidado de los niños y el número de comidas familiares cotidianas.
Para seleccionar indicadores apropiados, se podría comenzar con determinar cómo la comunidad percibe su situación alimentaria y nutricional. Es importante conocer qué problemas de nutrición o suministro de alimentos son de mayor preocupación para los diferentes grupos de hombres y mujeres en la comunidad, y cómo ellos quisieran enfocar el problema. Además de esto, podrían seleccionarse muchos indicadores basados en la forma cómo la población local define el éxito o fracaso del proyecto. Algunas posibles sugerencias para los indicadores, basados en Ogle (1987), se dan en el apéndice 4. Los indicadores son divididos en categorías, fundamentadas en posibles objetivos relacionados a la nutrición, y deberían modificarse a la luz de circunstancias particulares.
