El principio más importante que debe comprenderse con respecto al DRR, es que no se trata de una metodología para recabar información, per se, sino de una utilización creativa y estructurada de determinado instrumental de investigación para apreciar los aspectos de una situación, tema, problema o sector. El DRR y su juego de herramientas pueden describirse como un proceso de aprendizaje rápido, en base a la selección y uso creativo de un conjunto de herramientas de las ciencias sociales para la recopilación y análisis de información. Los equipos de trabajo que emplean dichas herramientas están en capacidad de diagnosticar las prácticas de manejo de los recursos naturales y los-problemas para su mejoramiento, con una precisión y eficiencia de costos superiores a los que ofrecen los métodos de investigación convencionales. Ningún ejercicio de DAR es iguala otro. Se emplean diferentes combinaciones de herramientas para evaluarlos temas de interés y se utilizan determinadas herramientas para difundir de forma más digerible los resultados alcanzados por un equipo, de tal manera que puedan ser aprovechados por los planificadores, el personal del proyecto, la población local y los funcionarios del gobierno. El DRR fue desarrollado, inicialmente, por científicos sociales para que los planificadores pudiesen obtener información oportuna sobre la dimensión social y cultural de los problemas de manejo de los recursos naturales. Se ha convertido en una metodología multidisciplinaria útil para recopilar y analizar información sobre diversas cuestiones técnicas.
Como una de sus contribuciones al diseño y ejecución de programas agrarios, el DRR ha cambiado la perspectiva de los especialistas técnicos en relación con sus propios ámbitos de especialización y les ha ayudado a redefinir sus prioridades de investigación a la luz de factores relacionados a otros campos técnicos. En lo que a la estructura se refiere, los métodos de DRR están a medio camino entre la encuesta formal y las entrevistas no estructuradas, minuciosas, basadas en la observacion, de los participantes. A diferencia de otros métodos de investigación, el diagnóstico rápido procura crear un diálogo con los usuarios/beneficiarios del proyecto, permitiendo que los entrevistados también puedan conducir la entrevista, y no sólo los entrevistadores. Esta característica de la metodología resulta importante para el análisis de las condiciones locales en las cuales se promoverán las intervenciones contempladas, ya que favorece la recopilación de datos relativos a valores, opiniones, objetivos y conocimientos técnicos propios, así como de información biofísica y económica.
Los métodos de diagnóstico rural rápido son de corta duración. En general, los datos obtenidos de las encuestas no son estadísticamente solventes ni permiten la comprensión profunda lograda mediante los métodos de investigación cualitativos y de larga duración. La calidad de los resultados de una encuesta o trabajo de planificación basados en el DRR dependerá, considerablemente, de la capacidad de discernimiento que tenga el equipo analítico para combinar, ton ingenio, los elementos del juego de herramientas y de su experiencia en detectar cuestiones claves dentro de un período de tiempo limitado. Tal como sucede con el periodismo de investigación, el factor "suerte" también contribuye a sacar la información a la luz. Pero, solamente la experiencia le permitirá al equipo de trabajo valorar lo que ha conseguido. Como en el caso de la investigación antropológica detallada, este método implica el análisis y evaluación de problemas durante el proceso de recopilación de la información y no una vez concluidas todas las entrevistas, como ocurre en las encuestas formales.
Sin embargo, cuando se las utiliza adecuadamente, las herramientas de diagnóstico rápido pueden generar cuantiosa información fidedigna sobre problemas específicos de manejo de recursos naturales. Por ejemplo, John Bruce, del Land Tenure Center, Madison, Wisconsin, ha producido una lista de verificación (Checklist) para los proyectos forestales que sirve para identificar la problemática de la tenencia y orientar estudios ulteriores (Bruce, 1989). El diagnóstico no es necesariamente un evento puntual, sin seguimiento. En las investigaciones sobre sistemas agrícolas, el DRR se utiliza como método para definir el alcance de las investigaciones apropiadas y para evaluar si la investigación ha sido concebida adecuadamente para las necesidades locales. Se puede emplear durante la ejecución de un proyecto como herramienta de evaluación periódica, para determinar rápidamente dónde yacen los problemas y para proporcionar una base de diseño de un estudio más formal o minucioso. El personal del proyecto también puede realizar ejercicios de DRR en forma periódica e incrementar así su propia comprensión de problemas específicos.
El juego de herramientas de DRR se desarrolló, inicialmente, porque los proyectos no habían podido hacer un uso efectivo de otros métodos más formales de recolección de información. Las encuestas formales a menudo presentan los siguientes problemas:
1) el tiempo transcurrido entre la encuesta y la producción de resultados,
2) el alto costo de realizar la encuesta,
3) los bajos niveles de confiabilidad de los datos, debido a los sesgos en las entrevistas y a los errores en el diseño de los cuestionarios (conocidos como errores no muestrales en la jerga estadística), y
4) la falta de correspondencia entre muchas preguntas y los fines prácticos específicos.
Los estudios de larga duración pueden aportar información importante para la planificación de proyectos, pero sus resultados también tardan. La información recopilada por los investigadores, para fines distintos a los del proyecto y para una población más reducida, no puede ser directamente utilizable por un proyecto, sino deberá compararse, primeramente, con las impresiones obtenidas en el terreno y con los resultados de macroestudios, antes de que pueda aplicarse correctamente a la zona del proyecto. Los métodos de encuestas formales o cualitativas tampoco generan un diálogo interdisciplinario entre quienes investigan, planifican, adoptan decisiones, y los beneficiarios, porque las personas contratadas para efectuar las encuestas pocas veces participan en el proyecto mismo.
La recopilación de los datos de seguimiento y evaluación (SyE) mediante métodos formales ha venido enfrentando una problemática especial. Se ha tardado en poner en marcha las unidades de S y E de los proyectos en relación a otras unidades del equipo; los sistemas de informática desarrollados han resultado innecesariamente complicados; el análisis de la información ha sido lento; el personal de S y E ha quedado al margen de los niveles de decisión; y los resultados de las encuestas no han sido organizados o analizados de una manera útil para quienes adoptan las decisiones. Los consultores contratados para llevar a cabo investigaciones minuciosas y cualitativas, con carácter de estudios especiales, muchas veces no han tenido una comprensión de los problemas prácticos de la puesta en ejecución y han llegado a conclusiones insostenibles. Frecuentemente, al diseñar y analizar proyectos se han omitido estudios cualitativos y minuciosos, porque quienes adoptan las decisiones no quieren esperar los resultados, porque quienes estaban en capacidad de realizar las investigaciones en el país del proyecto -fuesen ellos nacionales o extranjeros- tenían otras ocupaciones o se les consideraba prejuiciados o sesgados contra el organismo encargado del proyecto.
Si se los pone en práctica adecuadamente, los trabajos de encuesta y planificación pueden ofrecer varias ventajas.
Primero: son trabajos interdisciplinarios y pueden incluir tanto a los responsables de la toma de decisiones, como a los investigadores, porque el período es más corto y flexible. Hay una oportunidad para que quienes investigan, quienes adoptan las decisiones y quienes reciben los beneficios puedan cambiar impresiones. El resultado podría ser un apoyo institucional para investigaciones minuciosas o formales, si los responsables de las decisiones y/o los investigadores se convencen de la importancia de un problema específico. Es mucho más probable que los responsables de las decisiones aprueben un estudio de más larga duración para evaluar cuestiones de tenencia de la tierra, por ejemplo, si uno de ellos ha participado en algunas visitas de campo, durante las cuales se determinó que esto constituía un factor limitativo fundamental. Al haberse empleado un criterio interdisciplinario, también es más probable que la concepción del estudio refleje problemas más reales.
Segundo: las técnicas de entrevista son más flexibles y adaptables que los cuestionarios de encuestas estadísticas y reducen los errores no muestrales originados en una inadecuada selección de la pregunta y en la falta de verificación cotejada para determinar si el entrevistado y el entrevistador se han comprendido.
Tercero: el juego de herramientas para el manejo de los recursos naturales incluye varias herramientas interactivas para recabar información por medio de diálogos cuidadosos con clientes locales.1 Estas técnicas crean una estructura de diálogo que les permite a los investigadores y a los entrevistados mirar la situación desde una óptica compartida. El trazado de mapas es una de estas herramientas que se está incluyendo en los estudios de campo cualitativos de más larga duración.
Cuarto: los métodos de DRR permiten una revaluación de las hipótesis en el transcurso del trabajo de campo -tal como lo hace la metodología de las investigaciones cualitativas de larga duración-, de modo que las preguntas pueden irse adaptando a la luz de las nuevas informaciones obtenidas.
La expresión "ejecutado adecuadamente" se ha empleado varias veces en la anterior sección referida a los antecedentes. Este es el eje de la controversia en torno a la aplicabilidad de los métodos de DRR a una gran variedad de propósitos tanto durante la planificación como durante la ejecución de programas. El juego de herramientas de DRR es:
a) rápido, para que los resultados puedan entregarse oportunamente a quienes toman las decisiones,
b) adaptable, porque adecúa diversas técnicas de entrevistas y encuestas para satisfacer necesidades de acopio de información específica,
c) integral (holístico), porque capta una visión multidisciplinaria de la situación local, y
d) interactivo, porque genera un diálogo entre los investigadores y los clientes del proyecto.
El juego de herramientas incluye técnicas comprobadas, que se han tomado de la metodología de entrevistas y encuestas, adaptándolas al propósito específico de los trabajos de planificación o encuesta. Los integrantes del equipo toman las decisiones metodológicas basándose en su experiencia personal y en su comprensión profesional acerca de la forma de reducir el sesgo al recabar información. Por tanto, la calidad de una encuesta de campo en la cual se emplea el DRR dependerá muchísimo de la experiencia de quienes realizan el trabajo. Esta advertencia ha suscitado bastante controversia en torno a si el empleo del DRR genera información confiable y adecuada para su propósito.
Estas limitaciones se reconocieron desde el momento en que se comenzó a preparar el juego de herramientas de DRR. Al principio, no constituía un problema mayor por cuanto el DRR se había empleado pocas veces y, generalmente, lo habían llevado a cabo profesionales de excelente preparación con experiencia en el campo, los cuales prestaban una atención muy conciente a las cuestiones metodológicas. Se ha extendido considerablemente el empleo del DRR en el manejo de los recursos naturales y se está adaptando el juego de herramientas para satisfacer una gran variedad de propósitos. Lo están empleando diversos grupos de personas: científicos sociales expertos, especialistas técnicos en otras disciplinas, administradores de proyectos de nivel profesional, personal extensionista local, personal de SyE, e investigadores asistentes de los institutos locales. Hasta ahora, hay muy pocas pautas indicativas de los niveles mínimos de preparación que son necesarios para emplear las diferentes partes del juego de herramientas. Hay, además, pocas evaluaciones críticas de los fundamentos metodológicos de las diferentes técnicas que definen los parámetros básicos para una aplicación acertada del DRR.
¿Por qué existe ese vacío? Hay varias razones. Primero: el juego de herramientas es relativamente nuevo y los problemas que surgen comúnmente de su empleo, en diferentes situaciones, apenas empiezan a comprenderse. Segundo: las aplicaciones del conjunto de herramientas varían considerablemente y quienes redactan las guías se han mostrado renuentes a generalizar los aspectos metodológicos en las diferentes aplicaciones. Tercero: mientras los expertos en DRR que producían las pautas y dirigían la capacitación eran científicos sociales profesionales, se asumía que las respuestas a las interrogantes metodológicas se enmarcarían en la categoría de "sentido común" (para citar a Robert Chambers); es decir, constituían principios básicos de una acertada recopilación de datos aprendida mediante el aprendizaje académico y/o mediante una amplia experiencia práctica en entrevistas sobre el terreno.
El presente trabajo se propone resumir las cuestiones metodológicas que han surgido de la aplicación y desarrollo del juego de herramientas de DRR, para que los usuarios de los varios manuales y métodos tengan conciencia de su existencia. También, compara las soluciones ofrecidas por diferentes métodos para algunas de estas cuestiones, con el propósito de ayudar a los usuarios a hacer una selección práctica de estas opciones. Se espera que esta presentación constituya un paso hacia la resolución final de estas cuestiones, a medida que el DRR adquiera una mayor difusión y se acreciente nuestra experiencia.
Los principales propulsores del DRR se están preocupando cada vez más por determinar si una adecuada capacitación en la metodología de DRR puede ayudar a resolver las cuestiones metodológicas. El personal docente de la Universidad Khon Kaen de Tailandia, del International Institute for Environment and Development de la Universidad de Sussex, Inglaterra, y del ICRAF en Kenia, están encarando el problema de convencer a las instituciones de los países anfitriones -que están tratando de desarrollar esta capacidad metodológica-, acerca de la imposibilidad de impartir una capacitación instantánea en este método. No hay un consenso, ni siquiera entre quienes componen este grupo medular, respecto a lo que es una capacitación suficiente de capacitadores y profesionales independientes. Algunos afirman que bastan seis meses, otros dicen que tres, y algunos dicen que se necesitan seis meses seguidos de varios años de aplicación práctica.
Una sección de este trabajo analizará con bastante detalle las cuestiones metodológicas y examinará las formas en que se las está abordando según los actuales métodos.
ENTREVISTADOS | |||
Informantes Claves |
Entrevistados Individuales |
Entrevistados de Hogares |
Entrevistados en Grupos |
Encuesta Diagnóstico |
Encuesta realizada en IESA para definir inicialmente los temas de investigación que interesan a los investigadores. | ||
IESA |
Investigación y Extensión de Sistemas Agrícolas es un programa interdisciplinario elaborado para los Centros Internacionales de Investigación Agrícola (CIIAs) y difundido a otros institutos agrícolas del mundo. | ||
ICRAF |
Consejo International de Investigaciones Agroforestales | ||
IDS |
Instituto de Estudios para el Desarrollo, Universidad de Sussex, Brighton, Reino Unido | ||
IED |
Instituto Internacional para el Medio Ambiente y el Desarrollo, Londres, Reino Unido | ||
SyE |
Seguimiento y Evaluación | ||
ONG |
Organización No Gubernamental |
1 El término "dientes" es preferible al término 'beneficiarios" porque el primero tiene la connotación de una activa relación entre el personal del proyecto y los habitantes del lugar, en vez de una relación pasiva en la cual simplemente se "reciben" los beneficios.